Uno se acostumbra a vivir optimizando al máximo los recursos que le rodean. Cosas que otros apenas perciben, cobran un gran valor.
Eso me recuerda un ejercicio que da qué pensar:
Si te entregan tres cajas de cartón conteniendo: la primera cerillas, la segunda chinchetas y la última 3 velas : ¿qué podrías utilizar y cómo, para conseguir colocar las velas (y que se aguanten!!!) en una pared vertical?.
La mayoría de las personas se complica la vida y obtiene resultados poco eficaces, intentando pegar con cera las velas directamente en la pared o con chinchetas…
Sencillamente porque no tiene en cuenta como “recursos” también los envoltorios, es decir, las cajas de cartón, que pueden fijarse en la pared con las chinchetas y sostener sin penalidades las velas colocadas con un poco de cera.
Muy en sintonía con la situación actual, es verda que a veces no vemos lo que tenemos a nuestro alcance.
Lo voy a utiliza en una convención de ventas
Xavier
Y que lo digas,
Eva