No es culpa mía!!!
“No conseguí entrar en el equipo de ajedrez por culpa de mi altura” caricatura muy gráfica de lo que son las explicaciones tranquilizadoras.
Son aquellas donde me declaro inocente (“a mí, que me registren!”) y traslado la responsabilidad en factores externos a mí. Son explicaciones que no resuelven nada, el problema continúa existiendo.
Son aquellas donde me declaro inocente (“a mí, que me registren!”) y traslado la responsabilidad en factores externos a mí. Son explicaciones que no resuelven nada, el problema continúa existiendo.
“No te contesté porque no funcionaba internet”, no dista mucho de la frase de Woody Allen del inicio. Ninguna de las dos asume la responsabilidad de haber podido buscar o crear una vía diferente.
En las reuniones debemos evitar que se manejen este tipo de explicaciones cuando analizamos cualquier situación. Si no, entramos en el baile de las auto-justificaciones. Y para ello, el primero que se debe negar a bailar es el propio moderador.
Eva,
Yo en un lugar destacado, actualmente colocaría "es por la crisis" la explicación tranquilizadora por excelencia…
Montse
Cierto es que en reuniones a veces asistimos a un partido de tenis entre explicaciones tranquilizadoras, en espera de que sea al otro a quien se le caiga la pelota
Rubén
Gracias a los dos por vuestras aportaciones
Eva,
A parte de felicitarte por tu blog (no sabía que se podía escribir tanto sobre el tema), te felicito también por tu libro : no es fácil encontrar un libro sobre habilidades con el que tomes ideas y además te rías. Has retratado muy bien situaciones y modelos…
Gracias
Eli Matas
Me alegro de que te resulte interesante!