Reunirse para “decidir” lo ya decidido…
La mayoría de nosotros ha vivido ese tipo de reuniones en que el objetivo real era “vestir” de aprobación colectiva lo que evidentemente era una decisión individual del propio moderador o de las “altas instancias” de la organización.
Resulta muy desagradable ser convocado con el hipotético objetivo de tomar una decisión, y luego percibir claramente que la decisión ya estaba tomada de antemano y que no existe ningún margen de discusión ni comentario.
Si la reunión era informativa, así se debería haber indicado para no crear falsas expectativas. Sin llegar a fórmulas odiadas como el “eso es lo que hay…” si no hay margen de negociación o de modificación, eso debe saberse.
Pero aunque a veces la causa es la necesidad de una apariencia democrática, en otras ocasiones, sencillamente lo que hay es puro miedo a tomar una decisión unilateral -que al conllevar cierto riesgo- se prefiere compartir en una pantomima de reunión y de decisión conjunta. Situación típica del estilo de liderazgo autoritario inseguro.
La consecuencia en ambos casos es predecible: una pérdida absoluta de credibilidad que llevará a percibir con desconfianza cualquier reunión futura.
Hola Eva,
La verdad es que tienes razón, pero no siempre es fácil decirle a la gente "vengo a imponerte algo"…
Miguel
Hola a todos/as
Yo he vivido esta sensación y os aseguro que hubo un antes y un después con el director de la reunión.
Anna
Gracias Miguel y Anna,
Hay que empezar por no ser ambiguo en la definición del objetivo.
Si recibo una convocatoria en la que pone como tal: "decisión sobre X", puedo crearme falsas expectativas de que "podré participar en la decisión".
Sin embargo, si el objetivo es "informar sobre la decisión tomada por …" ya no voy engañado.
Suele provocar máyor rebote la sensación de tomadura de pelo que el hecho de no tener voz en un tema (salvando excepciones, claro)
Eva